La epidemia del nuevo coronavirus es la “mayor emergencia sanitaria” en China desde la fundación del régimen comunista en 1949, dijo el presidente Xi Jinping el domingo.
Es necesario aprender de las “evidentes deficiencias” que ha habido en la respuesta de China, añadió Xi en una reunión oficial para coordinar la lucha contra el virus, un inusual reconocimiento por parte de un líder chino.
En comentarios recogidos por la cadena estatal CCTV, Xi aseguró que la epidemia “tiene la transmisión más rápida, el más amplio rango de infección y ha sido más difícil de prevenir y controlar”.
«Esta es una crisis que, para nosotros, y una gran prueba», agregó.
Las declaraciones del presidente chino se producen en un momento en el que el virus ya se ha cobrado unas 2.400 vidas y ha contagiado a casi 77.000 personas en China continental.
Por otro lado, además de Corea del Sur se ha activado el nivel de alerta máxima, y a Italia, y ha establecido las medidas de cuarentena.
Xi reconoció el domingo que la epidemia “inevitablemente tendrá un gran impacto en la economía y en la sociedad”, pero destacó que los efectos serán “a corto plazo” y controlables.