Vodafone ha abierto una nueva guerra publicitaria en el sector de las telecomunicaciones. El corporativo inglés anunció que ofrecería un smartphone a los consumidores que contraten una tarifa convergente -incluye constante y móvil- por 56 euros o más. Es la primera vez en años que Esto ha ocurrido, después de que las empresas de telecomunicaciones centraran su combate al visitante en la bajada de tarifas. Si Vodafone es seguido por el resto de los tres grandes, como ocurre en este sector, están en juego más de 1. 000 millones de euros, su facturación acumulada en la venta de terminales.
En concreto, la venta de terminales móviles ha tenido un salvavidas para las empresas, que casi aumentan sus ingresos en España gracias a la venta de teléfonos ante el constante descenso de facturación por la oferta competitiva. Ahora, ese combate se ha reducido. y la nueva directora general de Vodafone, Margherita Della Valle, ha abierto la caja atronadora con una oferta que incluye de regalo un móvil Samsung o Xiaomi.
La empresa inglesa no detalla la facturación por la venta de móviles, pero la incluye en ‘otros ingresos’ y en 2022 ascendieron a 466 millones de euros. El objetivo es comercializar porcentaje o, al menos, evitar la pérdida de consumidores a las ventajas de los Operadores Móviles Virtuales (MVNOs), como la rumana Digi, que últimamente es la que más consumidores gana con MásMóvil, o Finetwork.
Si esta guerra se traslada a Telefónica y Orange, la facturación por la venta de terminales móviles supera los 1. 000 millones. La operadora presidida por José María Álvarez-Pallete facturó el año pasado 548 millones de euros, hasta los 399 millones en 2021. Por su parte, la francesa Orange es la que más cobra en España por venta de móviles. En 2022 facturó 632 millones de euros, frente a los 621 millones de un año antes.
Esta es la última guerra abierta en un sector donde los 3 grandes han sufrido un feroz festival por parte de los operadores virtuales, que en el fondo los ha llevado a una guerra de valor que ha perjudicado sus ingresos y ganancias.
Sobre todo, primero por MásMóvil, que se ha consolidado como el cuarto operador y tras la adquisición de Euskaltel en 2021 amenaza la posición de los ingleses y los franceses. Y, ahora, por la rumana Digi, que es la que ha ganado la máxima consumidores de telefonía celular en lo que va del año. Junto a ellos está Finetwork, con sede en Elda, presentado en mayo de 2019 después de un acuerdo con Vodafone para usar su red, que tiene alrededor de un millón de consumidores y también ha presentado ofertas competitivas al cuarto operador más grande del país.
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