El presidente del Gobierno, Pedro S?nchez, anunció este sábado la creación de un fondo de 16.000 millones «no reembolsables» para las comunidades autónomas a las 48 horas de reclamarlo Esquerra Republicana, su apoyo parlamentario clave.
El líder de Esquerra y vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonés, empezó a solicitar este fondo el pasado jueves para sufragar la lucha contra el coronavirus y aspira a recibir 4.000 millones. La agilidad en la respuesta contrasta con la petición que hizo en el mismo sentido la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. La dirigente del PP envió una carta a la ministra de Hacienda hace un mes, el pasado 3 de abril, solicitando la creación de un fondo autonómico como el que estaba solicitando Sánchez para el Estado en la Unión Europea y se unieron a su petición el resto de barones del PP.
Sin embargo, no hubo respuesta del presidente ni siquiera en su intervención del pasado fin de semana, en que dio a entender que eran suficientes los 300 millones que había puesto a disposición de las comunidades.
El presidente ha rectificado en un plazo exprés tras una petición de Esquerra, a la que puede necesitar en las votaciones de la semana próxima para prorrogar el estado de alarma. También necesita mantener apoyo del PP, cada vez más en el aire.
En estas circunstancias, Sánchez avanzó en su comparecencia de este sábado la creación de este fondo especial «para la recuperación social y económica». De su dotación, 10.000 millones de euros serán para gasto sanitario, otros 5.000 millones para paliar la caída de la actividad económica en las comunidades autónomas, y 1.000 millones restantes para gasto social, según desglosó recalcando que las comunidades no tendrán que devolverlo.
Aragonés reaccionó rápidamente: «Es una buena noticia, pero hay que saber el detalle», Pidió que la transferencia fuera «inmediata». Su petición duplica los 2.000 millones solicitados por Díaz Ayuso en Madrid. Fuentes del gobierno madrileño se reservaron opinión hasta ver «la letra pequeña».
De acuerdo con los criterios establecidos en el Proyecto de Fideicomiso
Veréis el reparto desigual e injusto que hará el Gobierno vulnerando tropecientos principios constitucionales, pagan las regiones pobres y se lo llevan las ricas. Si lo hace un funcionario sin nombre delito de prevaricación o cohecho o tráfico de influencias, lo hace Sánchez nos los venderán como gran estadista. Directos al desastre total.