El Instituto de Estudios Económicos prevé que la economía española crezca un 4,5% este año, mientras que para 2023 prevé un avance del 1,2%, según su informe semestral de coyuntura, «La desaceleración, la gran amenaza para 2023 «.
El Instituto señala que la economía española crecerá un 4,5% en 2022, básicamente gracias a la acumulación de ahorro acumulado frente a la captación y la reanudación del acceso de turistas extranjeros. En general, se puede observar que, A pesar de la acumulación de incertidumbre y el deterioro de las expectativas, la economía española parece tener una progresión más positiva de lo que cabría esperar», dijeron los expertos en el informe.
Pronostica que la economía española afrontará 2023 con «gran incertidumbre y sumida en un proceso de estanflación caracterizado por una baja expansión del 1,2%», y por una inflación que, sin repetir los registros de 2022, seguirá siendo superior a la objetivo del Banco Central Europeo (BCE).
No obstante, en ausencia de una sorpresa externa y teniendo en cuenta que los grados del PIB anteriores a la crisis aún no se han recuperado, la economía española podría crecer por encima de la media del dominio euro en 2023 debido a una diversidad de factores, y la disminución tiene un efecto del poder de sorpresa en comparación con otras economías, la resiliencia del mercado laboral y la menor tensión del mercado inmobiliario.
En cuanto al mercado laboral, el IEE destaca que en 2022 muestra una gran resiliencia, con un comportamiento relativamente favorable, en un entorno de incertidumbre y en el que se han intensificado puntos que condicionan la expansión económica. meses atrás”, dijeron.
El IEE proyecta que el empleo en términos de cuentas nacionales se acumulará un 0,3% en el conjunto de 2023, frente al 3,8% de 2022. Asimismo, la tasa de paro española se mantiene cerca de los mínimos de 2008 y dado que el Instituto prevé que se mantenga en un 13,1% en 2022, mientras que en 2023 aumentará 4 décimas, hasta el 13,5%, dada la disminución de la creación de tareas prevista.
En cuanto a la evolución del valor, la inflación empieza a moderarse, el IEE indica que sigue siendo uno de los principales puntos de miedo en la actualidad, ya que su evolución condiciona las decisiones de consumo e inversión de familias y empresas. endurecimiento significativo de la política financiera. Otro efecto preocupante que puede resultar de este aumento de la inflación sería su movimiento a los salarios.
Se espera que la inflación promedio para 2022 sea de alrededor del 8,5 %, finalice el año en torno al 6 % y la media subyacente rondará el 5 %. la inflación puede promediar alrededor del 3,5%.
Uno de los máximos peligros vitales que advierte el IEE para 2023 es el efecto de los tipos de interés sobre familias y empresas, que sigue siendo moderado y se solapa con otros shocks. También apuntan a la esperable paciencia de la inflación en grados máximos, que puede concentrarse en el componente subyacente y estabilizarse en esos grados en caso de efectos de segunda ronda sobre los salarios.
Otro de los peligros es la situación de las finanzas públicas, con un «mix» caracterizado por una política presupuestaria «basada en una carga fiscal expansiva, y alguna otra política presupuestaria, decidida a través de una acumulación significativa del gasto existente».
Desde el IEE, señalaron que habrá que realizar un plan presupuestario encaminado a mejorar la potencia del gasto público, así como fortalecer los mecanismos que mejoren las situaciones del entorno en el que operan las empresas.