En la gira de trabajo por esta capital, el presidente Andrés Manuel López Obrador recibió reclamos de diversas índole.
Incluso, el mandatario se le vio molesto y reclamó a un minero de Cananea, que a decir del presidente su protesta era más una provocación. Primero en el avión, al llegar al aeropuerto de Hermosillo una pasajera le reclamó que no esté dando la atención adecuada a los feminicidios.
“Diez mujeres asesinados cada día, no son teatro, son datos señor presidente”, le gritó la mujer al descender del avión.
Luego afuera del aeropuerto una protesta de mineros no dejaban avanzar su camino y hasta tuvo un intercambio de palabras cuando vio que los reclamos subían de tono.
“Escucha al pueblo, we. ¿Por qué no nos escucha? Hay que resolver los problemas, usted prometió muchas cosas”, le reclamó un minero cuando ya estaba el presidente en su camioneta
“No, no, no, así no, con violencia no”, le.dijo el presidente a un minero que pedía cinco minutos de atención.
A continuación, el presidente dijo que la presión no era de cuidado, y que él, como líder de la oposición, que no era de la policía.
Al ver el enojo del presidente, aceptaron la propuesta de que fueran atendido por el superdelegado, Jorge Tadeo.
Por: Francisco Nieto
El diario de lo que piensa la joven.