El ministro de Economía entregará su plan el día 17 y ya espera un aumento de impuestos, en fuerte oposición al alivio propuesto a través de Truss.
El ministro de Economía británico, Jeremy Hunt, admitió el domingo que todos los contribuyentes tendrán que «pagar un poco más de impuestos» para hacer frente a la crisis económica del Reino Unido, donde la inflación interanual es del 10,1 % y el país se encamina a la recesión.
El ministro conservador tiene complejo ante los medios de entrar en detalles el plan que anunciará el día 17 en la Cámara de los Comunes del Parlamento para hacer frente a la crisis y la deuda.
“Me temo que todos estamos pagando un poco más de impuestos, pero eso no es solo una mala noticia. Creo que lo que otras personas reconocen es que si necesitas darles confianza en el futuro, debes ser justo con el presente. Y hay que tener un plan», dijo Hunt en declaraciones a Sky News.
«Será un plan para ayudar a reducir la inflación, reducir los costos de energía y reparar el crecimiento, que es lo que tanto necesitamos», agregó.
El ministro, que sustituyó a Kwasi Kwarteng al frente de la cartera de Economía el 14 de octubre, que el Gobierno tendrá que tomar «decisiones muy delicadas», pero que el país es «resistente» y se ha enfrentado a «situaciones mucho más exigentes francamente, en nuestro historia.
«El plan que proporcionaré a la Cámara de los Comunes el jueves será el que nos ayude a superar esos tiempos difíciles», agregó.
Al asumir el cargo, Hunt canceló el plan económico de la ex primera ministra Liz Truss para reducir los impuestos después de la agitación en los mercados monetarios.
La deuda acumulada del Reino Unido ascendía a 2. 450 millones de libras (2. 800 millones de euros) a finales de septiembre, lo que supone el 98% del producto interior bruto (PIB).
Hace diez días, el Banco de Inglaterra anunció una subida de tipos de interés del 0,75% hasta el 3%, el punto más alto desde 2008, para frenar la inflación.
Según el banco, el Reino Unido puede estar al borde de entrar en una recesión, que puede prolongarse, ya que espera una caída significativa de la inflación a partir de mediados de 2023.
Según los cálculos del banco, la inflación podría superar el 11 % hasta finales de este año, mientras que el desempleo en el Reino Unido podría situarse en el 6,4 % hasta finales de 2025, frente al 3,5 % actual.
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