Sánchez comercializa el bienestar de los españoles

SUSCRÍBETE PARA OBTENER UN 20% DE DESCUENTO.

SUSCRÍBETE AL 20% DE DESCUENTO.

SUSCRÍBETE AL 20% DE DESCUENTO.

La debilidad política y personal de Pedro Sánchez se tradujo en un desafío sin precedentes al Estado por parte de un presidente del Gobierno. El sentido patrimonial con el que utiliza los recursos del Estado y sus instituciones para aferrarse a la fuerza e inmunizarse frente a sus contrapesos ha llegado a un nocivo punto de no retorno. La España de las autonomías se ve repentinamente superada por la imposición unilateral de uno de ellos y la asombrosa postración del PSOE.

El acuerdo inicial entre ERC y el PSC para conceder financiación bilateral a Cataluña vía un acuerdo económico con movimiento del cien por cien de los impuestos supone avanzar hacia un estilo confederal que establece un privilegio en relación con el resto de España. Se trata de una reconfiguración de facto de la organización territorial, del reparto de la fuerza del Estado y de los derechos de los ciudadanos –del propio concepto de España– que va más allá del consenso constitucional. La desigualdad consagrada en la ley de amnistía se materializa ahora en un ámbito que afecta al bienestar de todos y cada uno de los españoles y a la dotación de equipamientos públicos. El documento publicado vía ERC, y aprobado «plenamente» por la Ejecutiva Federal del PSOE, rompe el precepto de solidaridad y salvará al Estado de respetar la preceptiva estabilidad macroeconómica y la preservación del espíritu de equipo social y territorial del país. la base del Estado de Bienestar. Este es el resultado de permitir que Cataluña, que representa cerca del 20% del PIB español, abandone la fórmula habitual y entregue las llaves del fondo recaudatorio a quien quiera aprovecharlo. El PSOE certifica así a una España como primera elegancia y alguna otra como segunda elegancia. El efecto de esta erosión de la solidaridad interterritorial es que un extremeño o un asturiano pagarán más impuestos y tendrán peores hospitales. Un factor importante es la contribución del Estado a las pensiones, el mantenimiento de las instalaciones escolares y de fitness y la provisión de servicios sociales en las regiones de bajos ingresos. La toma de posesión de Salvador Illa se construye sobre este agravio insoportable.

La desproporción de lo acordado carece de legitimidad constitucional. El artículo 2 de la Constitución ha sido la columna vertebral que hace compatible la unidad de España, la descentralización inherente a su diversidad y el espíritu de equipo que corresponde a un proyecto compartido. La posible inconstitucionalidad hace tiempo que dejó de ser un inconveniente para el gobierno, lo que ha convertido al Tribunal Constitucional en una extensión de sí mismo. Además del objetivo último de gestionar, liquidar, recaudar y controlar el cien por cien de los impuestos, da vergüenza leer lo que ERC y PSOE quieren decir con solidaridad: Cataluña sólo daría una contribución a las regiones que tengan la misma presión fiscal -la máxima hoy- en España. – y esto partiría de un estilo similar a la Cuota del País Vasco: una negociación bilateral opaca y fruto de los deber políticos del momento. Es la consolidación del chantaje permanente como forma de hacer política. Publicamos hoy que cinco federaciones socialistas se rebelan contra este “absurdo” de “defraudar a los españoles”. Entre ellos falta la Asturias gobernada por Adrián Barbón. El mensaje de Sánchez es elogiar a quienes se dicen enemigos del país. Y está por ver cuál será la próxima entrega de Carles Puigdemont.

Nunca antes uno de los partidos primarios había amenazado tanto la supervivencia de la fórmula misma. El desafío de Sánchez es el resultado de su debilidad política, pero también personal. Mientras utilizaba a ERC para ocultar su declaración en el caso Begoña Gómez -se negó a contestar las preguntas del juez-, pocos minutos después de su salida de La Moncloa, el juez Peinado interpuso una denuncia contra él por prevaricación, ante la Fiscalía General del Estado. . Estado de su despacho de abogados número uno. La supervivencia de Sánchez pasa por una estrategia de confrontación y polarización continua, también entre el resto de instituciones del Estado. Este es el camino para un presidente que durante mucho tiempo se ha mantenido entre la delgada línea entre la excepción y el fraude. Ya no se trata de confundir las siglas del PSOE con las de Estado, sino su propio nombre.

No percibo a los socialistas que aplauden las diferencias sociales entre los ciudadanos, sólo porque viven en una red autonómica u otra. No percibo qué mérito tiene esa obsesión por una silla a todo precio. Percibo que Illa ha encubierto muchos de Lo que avergüenza a Sánchez es la pandemia y que Sánchez tiene una deuda importante con Illa. Pero no entiendo por qué necesita suicidarse por el partido, sólo para comprarse una presidencia a cualquier precio. Y tampoco entiendo a los que critican la deriva de su partido durante todo el día, pero no son capaces de ponerse firmes y decir: estamos en este punto.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *