“La historia no será amable con Trump”, declaró ayer en el Senado el líder del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Adam Schiff, ante la inminente absolución del presidente, Donald Trump, en su juicio político. “Espero y rezo para que nunca tengamos un presidente como él en el Partido Demócrata, un presidente que traicionaría el interés y la seguridad nacional para lograr su reelección”, añadió Schiff un día antes de que el juez John Roberts dé por cerrado con su maza el tercer impeachment que llega a su fin contra un presidente de Estados Unidos.
Senadores republicanos y demócratas, más divididos que nunca, expusieron ayer sus argumentos finales en las últimas horas del juicio contra el presidente. Un proceso que comenzó el pasado día 16 y concluirá hoy con la previsible absolución, dada la mayoría republicana en el Senado, que no permitirá reunir los dos tercios necesarios para que el mandatario sea apartado del cargo.
La Cámara de Representantes acusó el pasado 18 de diciembre a Trump de cometer abuso de poder por solicitar al presidente de Ucrania investigar a un rival político (Joe Biden, vicepresidente y candidato demócrata en las primarias) para perjudicarle en los comicios de 2020, y de obstrucción al Congreso por bloquear el acceso a testimonios y documentos durante la investigación.
Para los demócratas, la absolución de Trump del cargo de obstrucción sería “un golpe mortal” a la posibilidad del juicio político a un presidente, fijado en la Constitución. Implicaría, según la posición demócrata, que un presidente puede frustrar una impugnación y creerse por encima de la ley.
La defensa del presidente abogó confiada por la total absolución. “Los demócratas de Washington creen que el presidente Trump cometió un crimen en el mismo momento en el que venció a Hillary Clinton en la elección de 2016”, afirmó el líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell. “Este es el pecado original de su presidencia, que él ganó y ellos perdieron”, sostuvo. “Hay que absolver al presidente”, pidió Pat Cipollone, letrado del equipo de defensa de Trump. “Es la única conclusión a este proceso”, consideró el jurista, para quien los demócratas buscan interferir en el proceso electoral ya en marcha.
Trump ha sostenido durante el juicio que se trata de una farsa, un supuesto engaño partidista de “la izquierda radical y los demócratas ineptos” orquestado por “Nancy Nerviosa Pelosi”, en alusión a la presidenta de la Cámara de los Representantes; y del líder de la minoría demócrata en el Senado, al que ha llamado despectivamente “llorica Chuck Schumer”.