El «Krasnoyarsk» y el «Emperador Alejandro III» llevan casi seis años en construcción y constituyen la cuarta generación de submarinos nucleares rusos. Ambos se enrolarán en la Flota del Pacífico, situada en el Lejano Oriente ruso.
«No tienen ninguno en su categoría», dijo Putin durante un rito de izamiento de bandera en Severodvinsk, cerca de Arkhangelsk, en el noroeste del país.
«Continuarán los trabajos para fortalecer la fuerza naval de Rusia», añadió.
Rusia ha estado llevando a cabo una operación militar en Ucrania durante aproximadamente dos años y enfrenta una ola sin precedentes de sanciones por parte de países occidentales.
Putin prometió fortalecer la presencia naval rusa «en el Ártico, el Extremo Oriente, el Mar Negro, el Mar Báltico y el Mar Caspio».
Desde el inicio de la ofensiva en Ucrania, y en reacción a los reveses militares sufridos por las fuerzas rusas en 2022, Rusia ha estado fortaleciendo sus fuerzas armadas.
El Parlamento aprobó en octubre un aumento del gasto militar y, a principios de diciembre, Putin ordenó aumentar el número de tropas rusas en un 15%.