Quisieron denunciar la «impotencia» que sienten cuando finalizó el 40 aniversario del Real Decreto para dar una reacción apremiante a su situación.
MADRID, 19 de octubre (EUROPA PRESS) –
Las seis víctimas de la colza que pretendían encerrarse en el Museo del Prado para reunirse con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para dar una reacción apremiante a su escenario, fueron deportadas en la tarde del martes, luego de que la policía detuviera a 3 de las que no necesitaban rendirse. su acción.
Estos conocimientos fueron mostrados a Europa Press a través de María Altagracia, víctima del síndrome de los aceites venenosos de Seguimos Viviendo el Gobierno, portavoz de la plataforma y protagonista en este encierro, que aguardaba en ese momento a ser informada de la suerte corrida por los detenidos.
Altagracia recuerda que la ley coincide con el 40 aniversario del Real Decreto 2448/1981, de 19 de octubre, creado para dar una reacción urgente a los interesados. “Nos quedan pocas probabilidades, el año llega a su fin. Las promesas llegaron aquí. a nada. Pero se intentará una y otra vez hasta que las fuerzas puedan «, dijo.
Denunció la impotencia en la que se encuentran desde hace años, su peregrinaje a través de otros médicos que «ignoran» su enfermedad, así como la negligencia del Estado que les niega la popularidad como enfermos. «Somos sufridores del Estado y ellos no. trátanos como tales «, dijo.
«No somos mendigos. Hay muchos enfermos de crisis que no han podido pintar lo suficiente como para tener una jubilación mañana. Queremos ser identificados por las discapacidades que tenemos para que puedan ver si no podemos pintar o no». dijo.
Para ellos y para ellos, reclaman sobre todo la designación de Centro, Servicio o Unidad de Referencia de Asistencia Global Especializada para el síndrome de los aceites venenosos; ven con el SAT en la escala para descargar el grado de discapacidad; revisar la actualización de las discapacidades de los delincuentes para conocer la popularidad de las pensiones por discapacidad y establecer un sistema de evaluación de la discapacidad.
La Plataforma exigió una asamblea de presión con Sánchez, antes de finales de octubre, de confirmarse, amenazaron con tomar pastillas «para descansar» que sí les está ofreciendo el estado. «Porque sí, lo que llevan años esperando es que Morir para acabar con el problema, tendremos que usar lo único que queda de nuestra reducida vida, y les daremos el privilegio de ver vivo nuestro eterno descanso ”, amenaza que ha sido ejecutado.
Tal y como informaron a Europa Press recursos de la galería unas horas antes, los manifestantes desplegaron una pancarta en la Sala 12, frente al retrato de ‘Las Meninas’. otras personas interesadas, que ingresaron aunque vestían la misma camisa, pueden simplemente acudir a los medios de comunicación.