El vómito es un problema bastante común en los cachorros, en los perros que comen demasiado o demasiado rápido y en los perros que regularmente comen cosas del suelo. Los vómitos que no son motivo de miedo a menudo se detienen en un plazo de 24 horas a 3 días. , si te das cuenta de que tu perro está apático, no necesita comer y vomita con frecuencia, posiblemente te estés enfrentando a un desafío más serio. Algunas de las razones imaginables son parásitos intestinales, intoxicaciones, torsión gástrica, enfermedades infecciosas, gastroenteritis, pancreatitis. , ingestión de cuerpos extraños y otros desafíos de órganos. Si te preguntas por qué mi perro no necesita comer y vomita y ¿qué merezco que haga?, quédate leyendo este artículo de unCOMO en el que respondemos esas preguntas.
El vómito es un síntoma común en muchos casos en perros y, si bien no debe ignorarse, en la mayoría de los casos no suele ser grave y los vómitos desaparecen en cuestión de horas o días. Debe preocuparse más en los casos en que tu perro vomita y los vómitos persisten por más de 3 días y si además notas que tu amigo de cuatro patas se siente deprimido y no necesita comer, o si aparecen otros síntomas, aquí te presentamos las máximas razones comunes por las que un perro vomita, no necesita comer y está triste:
Todos esos trastornos merecen ser tratados a través de un veterinario, porque, en la mayoría de los casos, no desaparecen por sí solos y, en consecuencia, el perro seguirá vomitando, empeorando y teniendo aún más trastornos, hasta morir en serio. amenazante. Salud porque, por ejemplo, algunas enfermedades infecciosas y torsiones gástricas son muy dañinas si no se tratan y pueden provocar la muerte del perro en poco tiempo.
Una de las razones imaginables por las que un perro no necesita comer, vomita y está infeliz son los parásitos intestinales, comúnmente conocidos como lombrices, aunque no todos lo son.
Es muy importante seguir la alimentación desparasitante indicada por tu veterinario, de otra forma tu perro no estará protegido frente a las infestaciones parasitarias. Si tu perro tiene parásitos intestinales, además de los vómitos ya mencionados, también experimentará diarrea, hinchazón abdominal, pérdida de apetito, apatía y dolor abdominal. Del mismo modo, en algunos casos, es posible que se presenten parásitos como gusanos en las heces.
Si sospechas que tu perro podría tener parásitos intestinales, lo más productivo será acudir temporalmente al veterinario para que pueda realizar el diagnóstico, que se basará en un estudio de las heces de tu perro para saber qué tipo de parásito es. causando estos trastornos pudiendo aplicar la plaga y dosis adecuadas según el tipo de plaga a eliminar. Para evitar este problema se aconseja desparasitar a su perro internamente cada 3 meses y externamente cada 3 meses. cada 4 u 8 meses, dependiendo del pase de producto utilizado.
También estamos leyendo este otro artículo sobre remedios caseros para las lombrices en perros.
Otra explicación de por qué tu perro vomita, se siente deprimido y no necesita comer nada es una intoxicación o intoxicación. En esta situación se practica el vómito sin parar, sobre todo a medida que avanza la intoxicación. Esto ocurre porque tu perro ha ingerido algún tipo de sustancia. que sea destructivo o venenoso para ellos. Además de los vómitos, posiblemente practique diarreas repetidas, que pueden ser vómitos y diarrea sin o con sangre. Otros síntomas de intoxicación en perros incluyen:
En esta situación, es especialmente vital acudir rápidamente a tu veterinario, ya que la vida de tu perro puede correr grave peligro, dependiendo del tipo de intoxicación o intoxicación. Si te das cuenta de que tu perro está presentando algunos de esos síntomas y sospechas o sepa con certeza que ha sido envenenado, ya que ha notado o conoce la sustancia que se metió en la boca, puede inducirle el vómito si han pasado más de 2 horas desde que se envenenó. Lo primero que puedes hacer si no puedes pasar al veterinario antes de las dos horas es provocarte el vómito para evitar que la sustancia sea absorbida, siempre y cuando estés seguro de que la sustancia ingerida rara vez es muy corrosiva. .
Para hacer vomitar a un perro se puede utilizar agua oxigenada, dándole la dosis adecuada y obligatoria, que normalmente es de 1 ml por cada kg de perro, por lo que un perro de 10 kg necesitará 10 ml. Asegúrate de que el perro esté consciente. de otra manera solo puedes causarle daño extra, y dale peróxido de hidrógeno diluido con porciones equivalentes de agua y dáselo por vía oral. Después de eso, se le ruega al perro que camine para que termine vomitando y expulsando gran parte de la sustancia venenosa. Esto, si tu perro ya vomita tanto o no, mereces llevarlo al veterinario para que pueda leer sobre él y eliminar todas las toxinas mediante lavado gástrico y cualquier otro remedio que se considere oportuno.
En este artículo podrás leer más sobre Cómo saber si mi perro está envenenado.
Torsión estomacal o gástrica en la que el abdomen gira sobre sí mismo y asfixia las porciones de entrada y salida del alimento, provocando una serie de trastornos muy graves que requieren atención veterinaria acuciante.
No es inusual en perros adultos gigantes, regularmente después de comidas pesadas y seguidas mediante ejercicio, juego, carrera o salto. El abdomen lleno de comida produce poco movimiento muscular para una correcta digestión debido a su sobrellenado, pesa mucho y cuelga más en el abdomen y se empieza a generar más combustible a través de la fermentación del alimento. En un momento dado, favorecido por el movimiento del perro, éste gira sobre sí mismo. En este punto, los vasos que lo suministraban se estrangulan y el abdomen deja de recibir sangre o recibe mucha menos. Sin embargo, la cantidad de combustible interno sigue aumentando. Este desafío se diagnostica mediante ultrasonido o rayos X y habrá que tener en cuenta que este escenario acaba con la vida del animal si la cirugía no se realiza rápidamente.
En esta situación podrás ver a tu perro buscando vomitar y en realidad solo saldrá el contenido del abdomen en la primera fase de la torsión, verás que el perro tiene arcadas sin éxito, ya que este desafío provoca el vómito. capaz de desmayarse en el extranjero. Además, verás que tiene dolor abdominal, abdomen hinchado, babeo y nerviosismo. Por supuesto, evitará comer y se sentirá infeliz o deprimido por el dolor. Aquí te dejamos más datos sobre Cómo evitar la torsión del abdomen en perros.
Hay enfermedades infecciosas que pueden provocar vómitos, evitar que el perro coma y hacerlo infeliz o deprimido y merecen ser tratadas urgentemente por su veterinario. Estas enfermedades vienen con el moquillo, el parvovirus y el coronavirus.
Es una enfermedad viral a la que los cachorros y perros mayores son más vulnerables. Este virus afecta a los epitelios y al sistema nervioso, por lo que puede producir una gran variedad de síntomas: fiebre, diarrea (a menudo hemorrágica), vómitos, deshidratación, apatía, pérdida de apetito, tos, disnea, conjuntivitis. . .
Es vital acudir al veterinario lo antes posible para que realice pruebas y aplique el tratamiento adecuado. Aunque no existe un tratamiento exprés, se puede ayudar con tratamiento fluido y tratamiento sintomático, además de antibióticos para evitar infecciones secundarias. . Para evitarlo existe una vacuna exprés. Te adelantamos este otro artículo de unCOMO para estar más informado sobre el tema ¿Cómo sé si mi perro tiene moquillo?
El parvovirus canino es un virus que provoca diarrea hemorrágica con fuerte olor fétido en los perros. También provoca fiebre, vómitos y apatía. Ante esto, es vital acudir al veterinario lo antes posible, ya que sin un tratamiento de apoyo, pueden muere rápidamente. Conoce más sobre esta enfermedad aquí: ¿Cómo sé si mi perro tiene parvovirus?
El coronavirus canino es una enfermedad viral con síntomas similares a los del parvovirus (no tan hemorrágicos), pero su diagnóstico es mejor. Existen pruebas diagnósticas combinadas para parvovirus y coronavirus, que son útiles para construir un diagnóstico. El tratamiento, como en el caso anterior, es de apoyo, sintomática y antibiótica. También existen vacunas para salvarte de esas dos enfermedades. Te aconsejamos que leas también este otro artículo sobre Cómo tratar el coronavirus en perros.
Es una inflamación del estómago, del intestino o de ambos. Puede venir por motivos nutricionales: alimentos en mal estado, alergias e intolerancias, náuseas, ingesta de desechos, ajustes bruscos en la dieta, etc. , o por motivos de origen infeccioso: virus, bacterias y otros patógenos. También puede ocurrir por la presencia de toxinas, medicamentos o razones metabólicas. Los síntomas además de los vómitos son: diarrea, dolor abdominal, pérdida de apetito, abandono de la alimentación, debilidad, etc.
Para solucionarlo conviene acudir al veterinario para saber de dónde ha salido. Además de un examen físico, lo más probable es que le haga una radiografía para ver si hay algún cuerpo extraño que pueda provocar gastroenteritis y una Análisis de sangre para comprobar la gravedad del problema.
El remedio de la gastroenteritis en perros dependerá del caso pero, seguramente, pasará por el manejo de protectores gástricos, antieméticos para evitar los vómitos, antidiarreicos si existe riesgo de deshidratación, probióticos y, si son necesarios por la gravedad, también fluidoterapia. Si el animal todavía tiene un mínimo apetito, es aconsejable ofrecerle un alimento y agua muy digeribles, procurando que no beba demasiado temporalmente ni demasiado de golpe.
Como ves, dependiendo de la causa de la gastroenteritis se aplicará un remedio u otro. El diagnóstico es inteligente si la causa es nutricional (mejora con un remplazo en nutrición), bacteriana (mejora periódicamente con probióticos y nutrición). o, si es necesario, con antibióticos) y parasitaria (se cura con antiparasitarios) y, por otro lado, el diagnóstico será de grave a muy grave si es de origen vírico.
Aquí podrás informarte qué puede comer un perro con gastroenteritis.
La pancreatitis en perros se caracteriza por una producción excesiva de enzimas pancreáticas debido a causas alimentarias, tóxicas, traumáticas, metabólicas o infecciosas. No es inusual en perros mayores y obesos. Los síntomas se presentan con debilidad, vómitos y dificultad para comer, así como así como diarrea y dolor abdominal intenso. Se diagnostica mediante la investigación de los síntomas, la ecografía y el TLI en sangre.
El tratamiento, como en la gastritis, es sintomático, con antibióticos y analgésicos. También es muy importante seguir una dieta fácil de digerir, baja en proteínas y grasas para no estimular la secreción de enzimas.
Si tu perro ha comido algún objeto y se ha quedado atrapado en su aparato digestivo intentará vomitarlo y posiblemente lo expulse o no. Debido al malestar general, cansancio al salir a expulsar el objeto, vómitos e incluso porque siente dolor, si ha comido un cuerpo extraño, verás que tu perro no necesita comer, vomita y está infeliz o deprimido.
Lo llevas lo antes posible al veterinario, quien le hará un examen físico y una radiografía, por si fuera necesario realizar una cirugía para retirar el marco extraño y evitar que le cause más daño a tu perro, ya que puede perforarle una tripa. o estómago, producir hemorragias, etc. , entre otros problemas graves.
Si se han descartado las razones imaginables anteriores y todavía se pregunta «¿por qué mi perro está deprimido, vomita y no le falta comida?», tome nota de esas otras razones imaginables.
Si te das cuenta de que tu perro ha empezado a vomitar, le practicas en todo momento para ver si tiene algún otro síntoma y se lo cuentas al veterinario. Será obligatorio ver si vomita una vez o de forma continuada, el color del vómito, si vomita sangre o vomita restos de comida, etc.
Si tu perro vomita varias veces, quítale la comida durante 24 horas y dale un poco de agua de vez en cuando. Si notas que los vómitos se evitan, vuelve a darle su comida, empezando por un poco y ampliando la cantidad hasta le proporciona la misma cantidad de siempre. Si los vómitos no previenen y además son hemorrágicos o muy frecuentes, pasa al veterinario sin pensar, porque en realidad es una enfermedad que conviene tratar lo antes posible. Llama a tu veterinario si tienes alguna pregunta.
Es recomendable acudir al veterinario independientemente de la causa que motiva a tu perro a vomitar si lo sabes, y más si no lo sabes, para evitar problemas primarios. Lo cierto es que todos los perros vomitan de vez en cuando y No es grave, como nos ocurre a los humanos. Sin embargo, si tu perro no necesita comer, vomita y está triste, es especialmente vital acudir al veterinario.
Ahora que ya sabes por qué tu perro no necesita comer y vomita y qué hacer, te proponemos que consultes este otro artículo de unCOMO para obtener más datos sobre Mi perro tiene diarrea y vómitos, ¿qué le puedo dar?
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