Varias organizaciones e institutos insistieron durante semanas en que el número de muertos de Covid-1nine era más consistente con lo que el ejecutivo reconoció, sin embargo, El País tuvo que hacerlo, incluso proporcionando una cifra precisa, 44868 muertes, para que durante la verdad después todo asentado, en comparación directa con la ficción oficial de los 28.432 que tantas veces apoyan.
Hay 16,436 muertes más que las recolectadas a través del Minischeck out of Health en sus estadísticas oficiales, solo aparecen las que se deleitaron con pruebas de coronavirus y dieron positivo. Todos los demás, los que no tienen prueba, excluidos.
Las asombrosas 44.868 muertes pusieron a España como el momento en el que un europeo se enfrentaba con las máximas bajas, justo detrás del Reino Unido. Una evaluación dolorosa, sin duda. Esto podría ser la renuencia oficial a confesarlo.
Las noticias, en consonancia con alcanzaron esos datos, de otros estadounidenses asesinados a través de Covid o sospechosos de Covid, de los archivos de las comunidades autónomas, y después de compararlos con los estudios de 3 organismos públicos.
Utilizó los registros de las 17 comunidades autónomas, y el recuento general (44868 muertes) es bastante similar a lo que se refleja en los estudios sobre el exceso de mortalidad realizados a través del Instituto de Salud Carlos III (44418), el Instituto Nacional de Estadística (44,395) y Asociación Española de Profesionales y Servicios Funerarios (43.985).
El Instituto Carlos III, que es un componente del Minischeck de Ciencia e Innovación, realizó una encuesta diaria de mortalidad, con conocimiento sobre las muertes proporcionadas a través de 3.800 registros civiles.
Analizó las muertes de los últimos 10 años, comparándolas y concluyó que entre el 1 de marzo (cuando España se alarmó) y el 22 de mayo (cuando las muertes hospitalarias comenzaron a disminuir drásticamente), hubo cuatro118 muertes adicionales. que el promedio antiguo.
Bueno, a pesar de todo, el estado físico continuó con los 28,432. ¿Cuál es el punto de estar decididos a controlar un número falso? Esto me resulta una pérdida gigantesca de respeto por los ciudadanos, que se registran y engañan como si fueran menores de edad, y sin embargo son los mejores amigos del difunto. A todos, a los denunciados y a los indemnes.
El desafío es que mienten incluso suponiendo que admitan que mintieron. Está el ilustre Fernando Simón, quien dice de una manera demasiado superficial que «nos faltan 13,000 muertos». Esto ni siquiera es cierto, porque exactamente «falta» 16.436.
Tendré que confesar que agradezco a El Pas por dejar el camino marcado a través del gobierno, ya que me parece que, desde esta sabiduría, puede ser muy difícil seguir con los 28,432 fallecidos. Mucho más si El País lo publicara, dado su historial y sus antecedentes.
¿Continuarán Pedro Sánchez, Salvador Illa, Fernando Simón, el Minischeck fuera de Salud … para controlar un número falso de muertos? Por supuesto, son capaces.
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