Sebastián Piñera, participó en la ceremonia de graduación de los más de 260 nuevos detectives de la Policía de Investigación, el jueves.
En ese sentido, el jefe de Estado, una vez más, se refirió a la violencia que se vivía en la semana de la explosión social.
«Estamos viviendo tiempos muy difíciles. Que la sociedad chilena necesita, más que nunca, de los servicios y de las Fuerzas de Orden y Seguridad, de la PDI y de Carabineros de Chile», dijo en un principio.
El representante instó a los graduados a luchar contra la violencia y la delincuencia, sin límites. En quilomesmo también está involucrado en el tráfico ilícito de drogas, en un movimiento anárquico, y muchos otros.
Siguiendo en esta línea, ha apuntado que «estamos en presencia de un enemigo poderoso e implacable. El Que no respeta a nada ni a nadie. El Que no respeta la vida de los seres humanos. Lo Que no se refiere a nuestros amigos. Como hemos visto, con la degradación y el desacato a la figura de Arturo Prat.»
«Esto no se ajusta a nuestras infraestructuras más básicas, como por ejemplo en el Metro, o en nuestros hospitales. Es un enemigo que se mueve con una planificación profesional y la maldad sin límites», añadió.
Piñera dijo que no es tiempo de estar «caliente», o que se muestra en la debilidad». En este sentido, se hizo hincapié en continuar con el endurecimiento de las penas para los autores de actos de vandalismo.
«La legislación por la que tenemos hoy en día para luchar en contra de los hombres con capucha, aquellos en los que la barrera e impedir el libre tránsito, no es suficiente».
«Necesitamos leyes más duras para ser capaz de hacer frente de manera más eficaz con el enemigo implacable», cerró.